80 letras

Escribir un texto en el que cada palabra empiece con las letras siguientes, respetando el orden y sin agregar más palabras. Podéis utilizar los signos de puntuación que necesitéis:

F A L S J A R E G L D S M O Z R T I O H N J C V E B S A Q O E C B A F D S P R T P L O Q E R T E S M A C V F E R P Z Y N E D T Y J N V X Q L M N K O R E S C A P.

LOCO AMOR

Fiona amaba locamente. Su jubiloso amor renacía en Ginebra, lejos de su maravilloso Orlando.
Zascandileando, recordaba tímidamente imágenes olvidadas, hermosas, nunca juzgadas.
¡Cuánto valían esos besos! ¡suaves! ¡amorosos! que Orlando entregaba cuando bailaban abrazados ¡Ferozmente demostraban su pasión!
Rebosaban ternura pasional, lujuria ,obsesión ... quebradas en recortes, todas ellas sin más.
Absorta, contrariada, viajaba furiosa; eligió reencontrarse pausada, zalameramente.
Ya no evitarían dormitar, tocarse, yacer juntos ....
Nunca volverían xenófobos queriendo levantar mentiras notorias ¡Kallaos !
Orlando rodeó ese sumiso cuerpo ahondándola puerilmente .

Ana

EL CUADRO

Fui a la sala Júpiter. Allí resaltaba el gran lienzo de siniestros matices. Observé zancudos roedores tirando inmensos obuses, humanos narigudos jugando contra viejos elefantes bizcos, sobrecogedoras arañas quemando ociosos esqueletos, corpulentos bisontes apilando fardos de secas provisiones.Recapitulé. Todo presentaba lo onírico, quería expresar recónditos temores en su mensaje. Acaso cada visión fuera extraña, rara.Parecía zambullirme y navegar en dimensiones tenebrosas. Ya jadeante, nerviosa, vi X querubines luciendo mantos negros. Kafkiano o real, esas sensaciones cubrieron aquella pintura.

Mercedes

LA SELVA

Fuimos a la selva, juntas: Ana, Rosa, Eva. Grandes locas del senderismo. Muchos osos, zorros, rinocerontes, tigres, indígenas. Ocho hombres negros, jóvenes, cogieron varios esqueletos bastante sucios, aunque otros en cambio brutalmente arañados. Faltaban dos semanas para regresar todas. Por lo ocurrido quedamos encerradas, rodeadas, tiradas. Esperábamos salir mucho antes, cuándo vimos fuertes elefantes rodeándonos. Para zafarnos ya no estábamos dispuestas, teníamos YUYU. Juntas nos volvíamos xantorreas. ¡Que lástima, nuestros magníficos kimonos oscuros, rotos estaban. Salimos corriendo a prisa.

Pepa

ROBERTO

Finalmente arregló la situación justamente. Él gozaba lidiando desbarajustes, situaciones malogradas. Odiaba zurrar. Roberto tenía interesantes opiniones hacia los jefecillos con vestimentas elegantes. Bastardos sin alma que, ofrecían elevadas cifras, boicoteando a funcionarios dechados.
Sin prórroga, Roberto tenía pensado lavar ofensas, quemar elaboradas redes tejidas en situaciones malolientes. A cambio vería fracasar estrepitosamente proyectos zozobrados y nocivos. Es decir, trincarían y juzgarían núcleos violentos, xenófobos, quebrantando los movimientos, negocios, kioscos onerosos. Reaccionando enérgicamente sobre canallas, asegurando paz.

Inés

LA HUIDA

Falsa Alarma. La situación justificaba aquel reconocimiento exhaustivo garantizando la demandada seguridad. Muchos orcos zarrapastrosos, rabiosos transitaban intentando ocultarse. Hordas nómadas, jaurías caníbales, vigilaban el barranco. Salimos antes que oscureciera. El camino bajaba. Al final decidimos seguir por recónditos túneles, pasadizos largos, ocultos, que enanos realizaron, túneles excavados según mitos antiguos. Cruzamos valientes. Fuera, espectros reconocían por zonas. Yacían nerviosos, esperando descubrirnos.Territorios yermos, jinetes negros vigilantes, x que lugares marcaban, noventa kilómetros, orcos… Resumiendo, estábamos condenados a perecer.

Juan Carlos

Una noche en la selva

Fuí a la selva. Junto al rio encontré: gansos, loros, dromedarios, serpientes, monos, osos, zorros.
Recogimos todo inmediatamente o hariamos noche.
- Javi, corre ¡vamos! El barco se atasca.

- ¿Qué? ¡oh!

Entonces cogimos bastante arena.
Frente del sofá, pongo, Rosa, todo para limpiar o quieres empezar recogiendo todo.

-¿Entonces salimos mañana ? Antes comemos ¿vale?

- ¡Fantastico! Entonces rápido, ponte zapatos y no estés descalzo.
Toni y Javi nunca vieron xilofono.

- ¿Qué lenta musica?¿No?
Karla o Rosa escuchaban su canción anoche pescando.

Rosa

La magia de las flores

Fuimos al lugar. Salimos juntos al riachuelo Erigo, gran lugar donde surge magia, obeliscos, zafiros radiantes. ¡Temblaba ilusión! ¡Oh, hallazgo natural!

José como vio echar bonitas sagitarias, antes quiso olerlas. Estábamos como babeando ante flores deliciosas. ¡Son preciosas! ¡Ramilletes!

Teníamos planes. Luego o quizás, empecemos riéndonos...tomando enormes salidas. Mi amigo comentó:

- Volveremos felices.

Entonces repartimos pétalos, zafiedades y nebulosas en dibujos tiernos. José nos vio xilófonos, quedando la magia nativa... Kevin obsesionado, relató este saber con amapolas preciosas.....

Mª Angeles

CAMINANDO

Fui a la sierra junto al río Ebro, gran lugar de salmones. Muchos osos, zorros, roedores todos interesantes, olfateaban huevos.
Ninguna jungla con vida es ella sin animales.
Quería olvidar el cansancio, bullicio, ajetreos familiares de semanas pasadas. Rápidamente todo pasó. La odisea que estaba resultando tan esperada, se maximizaba al caminar. Viendo felizmente el río por zonas.
Yo nunca esperaba descubrir tantos yacimientos. Jamás nadie vio Xerofitas que la madre naturaleza kafkiana ofreciera, raras especies secas con aspectos puntiagudos.

Charo

Mis hijas

Fue a la sombra, junto al roble. Estaban, graciosamente, las dos sonrientes; merendando, observando, zampándose rosquillas. Tras interminable observación, hicieron natación, juegos, carreras. Viéndolas brincando, sentía alegría ¡que orgullosa estaba!
Cada beso, abrazo fueron desde siempre para recordar, también para lograr olvidar que estresan revelan, te enfadan... son Marta and Carla.
Vivimos felices, estamos resolviéndoles problemas, zancadillas y nuestros evidentes desacuerdos también .Y juntamos nuestras vivencias xq lo mejor: nuestros kilométricos, originales, recuerdos entrañables, siendo comunicativas, amables, pacientes...

Amalia

Fuimos a la sierra juntos. Allí recorrimos el gran Lago Denia. Se me ocurrió zambullirme. Repentinamente tenía incrustadas ocho hidras negras. Juan cuando vio el bicho salió ayudarme, quitándomelas. Oímos el crujir al fulminarlas. Después salimos pitando.
Reiniciamos temerosos, prudentes los obstáculos que el relieve tenía. Encontramos siempre muchos anímales como: venados, faisanes en reproducción, perdices, zorros y nidos escondidos de tórtolas.
Ya juntos, necesitábamos volver porque la marcha nos kansó.
¡Ojala reivindicarán esa sierra como aldea protegida!

Paqui